EL REBELDE


COMENTARIO

 

La poderosa figura de esta carta es, claramente, el maestro de su propio destino. Lleva en el hombro el emblema del sol, y la antorcha que sostiene en la mano derecha simboliza la luz de su propia verdad ganada a duras penas.

   Independientemente de que sea rico o pobre, El Rebelde es realmente un emperador porque ha roto las cadenas de los represivos condicionamientos y opiniones de la sociedad. Se ha hecho a sí mismo abrazando todos los colores del arco iris, surgiendo de las raíces oscuras y sin forma de su pasado inconsciente y desarrollando alas para volar en el cielo. Su propia forma de ser es rebelde, no porque esté luchando contra alguien o contra algo, simno porque ha descubierto su propia naturaleza verdadera y está determinado a vivir de acuerdo a ella. El águila es su animal espiritual, un mensajero entre la tierra y el cielo. * El Rebelde nos desafía a ser lo suficientemente valientes como  para asumir la responsabilidad de lo que somos y vivir nuestra verdad.


EL REBELDE

 

 

   La gente tiene miedo, tiene mucho miedo de aquellos que se conocen a sí mismos, ya que tienen un cierto poder, una cierta aura y un cierto magnetismo, una carisma que puede sacar de sus prisiones tradicionales a la gente joven y vital...

  El hombre iluminado no puede ser esclavizado: ésta es la dificultad. Y no puede ser encarcelado...

  Cada genio que ha conocido algo de lo interior, va a ser, con seguridad, difícil de dominar. Será un fuerza inquietante. Las masas no quieren que se las moleste aún cuando puedan ser desdichadas. Son infelices pero están acostumbradas a ello, por lo que cualquiera que no esté en su misma situación se les antojará un extraño. El hombre iluminado es el extraño más grande del mundo. Parece como si no perteneciese a nadie. Ninguna organización puede confinarlo, ninguna comunidad, ninguna sociedad, ninguna nación. 

 


 

 

Comentario personal

 

El Rebelde (El Emperador)

 

La carta de "El Rebelde" corresponde a "El Emperador" en el Tarot de Marsella.

 

El Emperador, el padre, el político, el dirigente no es ni más ni menos que cualquier otra persona. Sólo que la misión de su vida es dirigir los designios de la Comunidad.

Como Emperador que es tiene sus privilegios y tiene sus responsabilidades. Para mí que la principal responsabilidad de El Emperador es saber escuchar.
Saber escuchar a su pueblo.
Escuchar con los oídos, pero también con el Alma.
Qué es lo que necesita su pueblo para que éste sea un pueblo libre, sabio y amoroso.

 

La segunda gran responsabilidad de un Emperador es saber mandar. Tener que decir en muchas ocasiones como deben ser las cosas y como deben ser hechas.
Siempre desde el respeto y la tolerancia.

 

Un emperador debe ser sencillo, humilde y a la vez Grande.
Grande de Alma.
Un Emperador debe ser alegre, divertido, feliz.
Un Emperador debe saber decir las cosas con una sonrisa.

Un emperador debe tener sus manos siempre dispuestas.
Una para dar y la otra para recibir.
Porque también un Emperador debe saber recibir.
Debe saber recibir con sencillez y humildad los elogios de su pueblo.
Por tener la bondad, la riqueza y la sabiduría necesarias para gobernar.

 

Un Emperador debe ser un ejemplo.
Un ejemplo en quien mirarse.
Un ejemplo a quien admirar.
A quien seguir.
Un ejemplo de Libertad.

 

Un Emperador debe haber visto, comprendido e integrado todos sus opuestos.
Luz y oscuridad.
Masculino y femenino.
Bueno y malo.
Salud y enfermedad.
Blanco y negro.
Dios y demonio.
Niño y adulto.

 

Un Emperador debe ser ese Ermitaño que ilumina con su farolillo el camino del que aún no ha llegado.
Y debe ser también ese Loco que nos lleva al precipicio y luego nos saca de él vestido de Confianza.

 

Un Emperador debe anteponer "El Todo" antes que a sí mismo.

 

Un Emperador debe haber roto las cadenas que lo atan a "lo que no es".
Para que su pueblo "Pueda Ser".

Por eso el Gran Maestro Osho le da a la carta del Emperador el nombre de "El Rebelde".

Un Rebelde hacia sus propios conceptos, hacia sus propias trabas, hacia sus propias limitaciones.


Un Rebelde hacia todo aquello que "no es".

Y todo:
Para que su pueblo "Pueda Ser"

 

 


      Dice el Bhagavad-gita:

"Yo nací en la más oscura ignorancia, y mi maestro espiritual me abrió los ojos con la antorcha del conocimiento..."